Lamia Lillim

Pertenecía a un recóndito grupo de numerosas hermanas que en las épocas más antiguas causaron los disturbios más sangrientos de los que indefensos pueblos y comunidades pudieron ser testigos. Después de varios años y de que un desafortunado acontecimiento cambiara por completo lo que era aquella colonia de brujas, Lamia logró escapar furtiva de allí siendo la única sobreviviente. Viene de las viejas colonias inglesas en Masachusetts; emigró a Francia para convivir con otras personas, se asentó sus primeros años junto a un campamento gitano con el cual creó migas volviéndose parte de ellos. Sin embargo; después de varios años terminó igualmente abandonándolos, siendo esas décadas dentro de Francia testigos de cómo su magia y su profundo conocimiento en artes oscuras creció aún más, llenando su cabeza de nuevas ideas para poner a prueba todo lo que había pulido.



Abandonó a su familia en Francia para emigrar a Londres e inmediatamente buscó unirse al Aquelarre Eyehollow, el único lugar en toda la capital inglesa donde podría dar rienda suelta a toda su habilidad en artes oscuras.

- Cazar niños
- Crear pociones y libros de magia negra
- Hacer malicias 
- Los gatos negros o cuervos
- Crear cuchillos con piezas viejas de espejos rotos.

-Está profundamente enamorada del líder de los Kinslayers y más de una vez busca atraerlo con sus artimañas



-Cuando desea algo no sale de su cabeza en lo absoluto hasta cumplirlo.



-Siempre dice lo que piensa aunque pueda ser sumamente ofensivo, sobre todo si se trata de mujeres que no le agradan.



-Al ser una bruja negra no tiene ningún reparo en recurrir a alimentarse de las formas más viles, como devorar niños o carne humana en general.



-No le importa ser cruel por tal de obtener lo que quiere, así como seductora sin precedentes

-Clásica bruja que tira al canibalismo, desde infantes hasta criaturas puras de magia que pueda usar para sus pociones con las cuales rejuvenecerse o alimentarse